Escritos sobre música





Powered by Blogger

Licencia de Creative Commons
Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons.

Gigante 2022. Día 3

~ martes, agosto 30, 2022 ~

El que creo que era el día con mejor cartel del Gigante 2022 empezaba con unos asturianos: Alberto y García. Los conciertos a primera hora siempre son complicados porque hay poca gente, pero ellos consiguieron que nos acercásemos al escenario y bailásemos con sus cumbias. Sonó muy bien y fue muy divertido, especialmente el final cuando bajaron el saxofonista y el percusionista a bailar con la gente. Un grupo con una personalidad importante que no sigue los caminos mayoritarios.




A continuación tocaron Colectivo Da Silva. No sabía nada de ellos y me sorprendieron: unos chavales muy locos, pero hacían música muy bien tocada, un pop con mucho groove. Sólo vimos un par de canciones porque luego nos movimos al otro escenario a coger sitio, pero escuchamos todo el concierto. Lo que no me convencieron fueron las letras: demasiado humorísticas para mi gusto.



Habíamos ido a coger sitio porque el siguiente grupo era de nuestros favoritos: La Habitación Roja. No sé si por estar en primera fila, pero me sonaron ruidosos: no se distinguía lo que hacían las guitarras. Empezaron con "El Día Internacional de los Amantes" pero el gran momento fue la traca final, con sus ya clásicos "La moneda en el aire", "Ayer" e "Indestructibles".



Sin dejar respiro, nos fuimos al otro escenario a ver algo muy especial: la reaparición de La Cabra Mecánica. Yo había escuchado mucho "Vestidos de domingo" y los vi en directo en aquella época en la Plaza Mayor de Gijón. Esta vez llevaba una banda all-stars: yo identifiqué a Fernando Polaino en las guitarras acústicas, Joe Ezeiza en la eléctrica, Dani Patillas en el bajo y David Carrasco en el saxo y los teclados. Llevaba otros dos vientos y la pena fue que, como pasa demasiadas veces en estos conciertos, el bajo embarullaba todo en algunas frecuencias. Empezaron fuerte, con "Felicidad", e hicieron un reprise al final. Hicieron también otros clásicos como "La lista de la compra" o la "Fábula del hombre lobo y la mujer pantera". Nunca entendí muy bien por qué Lichis decidió renunciar a ese repertorio tan rico. He estado leyendo estos días y parece que pasó una depresión en parte por una movida con "No me llames iluso". Yo creo que siguen siendo canciones muy buenas y que rescatarlas de vez en cuando puede hacer feliz a mucha gente: si yo fuese capaz de eso, no me lo pensaba.



Y sin descanso, cambio otra vez de escenario para ver a Lori Meyers. Ya los he visto recientemente en un teatro, pero son un grupo para festival: las canciones parecían todos singles para bailar y cantar entre todos. Muy buen concierto.



Lo siguiente también prometía, pero ya necesitábamos reponer fuerzas, así que nos perdimos el principio de Rigoberta Bandini y el resto lo vimos desde muy lejos. Me decepcionó: parecía que la música iba casi toda grabada, las voces no fueron muy buenas, y más que un concierto era una performance, que no me parece mal en principio, pero el problema es que me resultó demasiado naif, hasta cutre. La inteligencia, la ironía y la profundidad de las canciones no me pegaban con esa puesta en escena que parecía basada en una función de guardería. A la gente parece que le gustó, así que igual fue cosa mía.



Y así acabamos el Gigante, felices pero destrozados después de tantos conciertos... y tanto polvo, porque la verdad es que se merece un recinto con condiciones mejores.

Etiquetas: , , , , , , ,

Por Guillermo Hoardings | Enlace permanente
6:53 p. m. | Comentarios (0)

Gigante 2022. Día 2

~ sábado, agosto 27, 2022 ~

Llegamos cuando estaba empezando Nat Simons. La habíamos visto hace años en el Metrópoli y ha cambiado bastante: si entonces básicamente hacía Americana en inglés, ahora tiraba mucho más al rock y cantaba a veces en español y a veces en inglés. Sonaba muy bien.


Luego fuimos a cenar y vimos a Oba Tenga. No era de los artistas que teníamos planificados,  pero me sorprendió: un grupo con dos percusionistas, guitarra acústica y bajo que hacían algo en línea rumbera, pero muy bien hecho. Hubo hasta un pequeño homenaje a "El sueño va sobre el tiempo". Montaron una pequeña fiesta.


A continuación fuimos a Alice Wonder. Tampoco la conocía. Me pareció que tenía muy buena voz, aunque abusaba de filtros. Tampoco me gustó que fuese casi todo pre-grabado. De hecho,  a mitad de una canción le falló el ordenador y tuvo que empezar desde el principio. En cualquier caso, me pareció que tenía mucha personalidad.


Luego escuchamos un poco a Zabriskie. Sonaban bien y me recordaron a Nacha Pop, pero sus canciones no me decían mucho. También vimos un poco desde lejos a La La Love You, que montaron un fiestón en el escenario principal.

Por fin llegamos al plato fuerte de la noche para nosotros: Dorian. Hicieron un concierto muy parecido al que vimos en el Sonorama, aunque hubo alguna canción distinta. Consiguieron también poner a bailar a todo el mundo.



Por último, volvimos a la zona de comidas para ver a Repion. Tienen mucha fuerza, en especial la batería, que a veces me recuerda a Dave Grohl, pero sus canciones tampoco me convencen. Una conclusión después de ver tantos grupos que desconocía es que es muy difícil hacer canciones que en una primera escucha sean atractivas.



Etiquetas: , , , , , ,

Por Guillermo Hoardings | Enlace permanente
2:30 p. m. | Comentarios (0)

Gigante 2022. Día 1

~ viernes, agosto 26, 2022 ~

Segundo año que venimos al Gigante en Alcalá de Henares. El año pasado fue raro por la pandemia. Este año ha vuelto a ser normal. Se nota que es algo mucho más pequeño que el Sonorama, sólo tiene 3 escenarios y están muy cerca. Los dos principales están en paralelo y mientras actúan en uno, preparan el otro. Perfecto, porque además, como el recinto no está saturado, es fácil pasar de uno a otro. El problema es el tercer escenario, que está donde la zona de comidas: llega el sonido de los escenarios principales y se monta una cacofonía.

En general, ese fue mi mayor problema: el sonido de casi todos los grupos, también los del escenario principal, fue malo.

Empezamos viendo a Biuti Bambu mientras cenábamos en una de las pocas mesas que hay donde la zona de food trucks. No me gustaron. Creo que no le sacaban partido a lo tener dos voces femeninas y las canciones no me dijeron nada.


Luego estuvimos viendo un par de canciones de Fresquito y Mango. Totalmente fuera de lo que yo entiendo: unos chavales (¡qué jóvenes me parecen todos!) cantando/rapeando/autotuneando sobre unas bases pregrabadas. No entiendo de ese tipo de música, pero las bases tampoco me parecieron buenas.

Volvimos al escenario de los food trucks y vimos a Lady Ma Belle. Grupo muy festivalero que lo hacía bien, pero que a primera escucha me sonó muy genérico.


Luego volvimos a los escenarios principales a ver a Natalia Lacunza. De la que empezó no me gustó que no llevase bajo, pero fue sólo la primera canción: luego sí hubo bajo y fue peor, porque hacía una bola tan grande que se perdía todo el resto de la música. Lo vimos desde lejos y aunque parece que Natalia tiene una voz bonita y unas canciones que pueden ser interesantes, sonaba tan mal que no lo disfruté. Punto extra por llevar una banda toda de mujeres: creo que entre todos los grupos que vi, fueron las únicas instrumentistas. Una pena que haya tan poca igualdad en la música.


El siguiente grupo fue Cupido. La música no estaba del todo mal, pero la voz, con autotune y sin gracia, no había por dónde cogerla.


Regresamos a los food trucks para ver a Alis. A pesar de ser sólo un trío, nuevamente el bajo tenía unos subgraves muy molestos que transformaba la música en ruido.


Y por fin fuimos a lo que era para nosotros, y creo que para casi todo el festival, el plato fuerte de la noche: Miss Cafeína. Se nota el nivel: fueron los primeros que sonaron bien. Me llamó la atención de que, al igual que Alis, también llevasen algunas partes pregrabadas. Otro par de tendencias que no me gustan: cuando el bajista sustituye su instrumento por un sintetizador y cuando el batería usa sonidos electrónicos. Por lo demás, fue un buen concierto, aunque a mí me gustaron más cuando los vi más de cerca en el Albéniz de Gijón hace unos años, con un concierto menos de música de baile y más pop.



Etiquetas: , , , , , , ,

Por Guillermo Hoardings | Enlace permanente
11:57 a. m. | Comentarios (0)

Sonorama 2022. Día 5

~ martes, agosto 16, 2022 ~

Este año el Sonorama se alargó un día más y nos pilló por sorpresa: tuvimos que buscarnos un alojamiento y lo más razonable que encontramos estaba en Burgos. Quizás por eso llegamos tarde al primer concierto que quería ver: La Frontera. Hace unos años los había visto por casualidad y me habían impresionado. Yo creía que era un grupo de Los 40 y descubrí que eran un grupo de rock americano muy solvente. Además, creía que sólo conocía un par de canciones y resulta que eran muchas más: además de "Pobre tahúr" y "En el límite" estaban "Juan Antonio Cortés", "Judas el miserable" o "Si el whiskey no te arruina, las mujeres lo harán". Esta vez me decepcionaron un poco: me pareció que Javier Andreu estaba en peor forma y a veces parecía que farfullaba. Pero otras veces su poderosa voz sonaba atronadora y hacía justicia a ese repertorio tan potente. Toda la banda sonaba muy bien, pero destacaba el guitarrista.



Luego vimos un poco de lejos a Fuel Fandango, a los que no conocía. No me atrajeron mucho, aunque parecían originales. Después fue el turno de Daniel Fernández, al que tampoco conocía. Lo estuve escuchando sentado al fondo: mi espalda no daba para más. Me pareció que lo hacía bien pero era muy estándar.

A continuación tocó Loquillo. Me gustaba mucho en la época de "A por ellos que son pocos y cobardes" y le he visto varias veces a lo largo de los años, pero últimamente su chulería a lo John Wayne (del que, por cierto, he estado leyendo estos días lo mala persona que era) me echa para atrás. Vi el principio del concierto, que empezó con canciones nuevas, incluyendo ese "El último clásico" que sigue esa línea de autobombo que tanto me repatea. Por supuesto, la banda era excelente y luego atacó los grandes éxitos, pero para entonces nosotros ya nos habíamos movido al otro escenario principal para coger un buen sitio para ver a Dorian.




Se nota que son uno de los grupos del festival, autores de uno de sus himnos oficiosos, "A cualquier otra parte". Dieron un buen concierto, aunque los graves molestaban y me pregunto hasta qué punto lanzan secuencias. En cualquier caso, lo pasamos muy bien cantando y bailando. Por cierto, el batería me pareció impresionante: tocaba con la precisión de una máquina pero siendo una persona.

Volvimos a cambiar de escenario y ya nos tuvimos que situar muy lejos para ver a La casa azul. Tampoco es un grupo que conozca, aunque ya los había visto en directo en el Gijón Sound Festival hace unos años. También me pregunté cuánto era pregrabado. La gente disfrutó de las canciones, pero a mí se he hacían todas muy parecidas: de hecho, cada vez que empezaba una creía que era la única que conozco un poco más, "La revolución sexual", que, cuando llegó por fin, fue el momento más intenso del concierto.



Y así acabó para nosotros este Sonorama, distinto por ser el primer festival "normal" tras la pandemia. También, el primero que decidimos no ir al pueblo: el cuerpo no nos aguanta tanto y, por otra parte, los conciertos más interesantes, que son los de la Plaza del Trigo, no se pueden ver por lo masificados que están.

Si podemos, volveremos el año que viene.

Etiquetas: , , , , ,

Por Guillermo Hoardings | Enlace permanente
4:24 p. m. | Comentarios (0)

Sonorama 2022. Día 4

~ lunes, agosto 15, 2022 ~

El día comenzó con la triste noticia de un muerto y 40 heridos en el Medusa Festival al caer una estructura por el viento. A veces me da por pensar en los peligros de estas aglomeraciones de gente y, aunque estoy seguro de que la organización hace todo lo posible para evitar los riesgos, viviendo nunca hay riesgo cero.

En Aranda también había viento y la organización lo solucionó retrasando todo una hora, hasta que pasó la alerta. La verdad es que funcionó muy bien.

Nosotros empezamos el día con el concierto de Rufus T. Firefly. Me habían sorprendido gratamente hace años en el escenario del camping y fue un placer verlos en uno de los principales. Son un grupo muy original, con claras influencias psicodélicas. Es hipnotizante ver tocar a Julia, su batería, que se coloca en la muy infrecuente posición de primera línea del escenario de lado. Además, su estilo tiene algo de antiguo, de primeros años 70, con numerosos breaks largos. Hay influencias de Bonham, pero también tiene de estilos de música que vinieron después como la música disco. Es curioso que tengan también un punto progresivo, como los Estanques, y que hayan colaborado con Annie B. Sweet, que salió a cantar con ellos un par de temas. Con muy buen sonido y mientras anochecía, pudimos disfrutar de momentos mágicos. Además, aprovecharon para acercarse más al público en algunos momentos usando la pasarela que extraordinariamente estaba colocada para el concierto de C. Tangana. 




Tras ir a cenar, esta vez con más lío en la zona de comidas porque era la noche con más aforo vendido, fuimos al concierto de Amaia. Tenía ganas pero la verdad es que me decepcionó un poco: sus canciones propias me dejan con ganas de más y me parece que los arreglos no tienen la suficiente fuerza. Creo que la única que es un temazo es "El encuentro", la que hizo con Alizzz. Cuando más me gusta Amaia, con diferencia, es cuando se sienta al piano y da rienda suelta a su maestría: tiene algo especial para expresarse sólo con piano y voz y para adaptar las canciones a ese formato. Eso sí, sus fans disfrutaron mucho del concierto y ella cantó perfecto y combinó el deslumbrante brillo de alguien salido de Operación Triunfo con su naturalidad y su amor y su talento descomunal para la música.




Nos saltamos la M.O.D.A, que también tenía muchos fans con sus camisetas de "Héroes del sábado", para intentar coger un sitio al menos decente para ver a C. Tangana, pero fue misión imposible: ni siquiera alejándonos muchísimo del escenario estábamos medio cómodos. Aunque no me atrae lo que hace el madrileño, me lo habían recomendado y tenía interés en verlo, pero tras un par de canciones sufriendo por las condiciones, decidimos trasladarnos al otro escenario para coger sitio para algo a priori más acorde con nuestros gustos: el Concierto 25 Aniversario. Mientras esperábamos, pudimos escuchar lo que hacía C. Tangana porque, aunque no emitían las imágenes, que sólo se veían en una pantalla gigante en el escenario donde estaba el artista, sí ponían el sonido. No sé si era igual que en el escenario principal, pero tenía algunos graves que lo estropeaban y había momentos en que no se escuchaba la voz. Me llamó la atención la orquesta, aunque me parece que participó poco, y la parte de la fiesta flamenca, donde se recuperaron muchos clásicos del nuevo flamenco o aledaños, como "No estamos locos" (Ketama, con la participación de Juan Carmona), "La alegría de vivir" (Ray Heredeia), "Noches de bohemia" (Navajita Plateá) o "Corazón partío" (Alejandro Sanz). También me gustó cuando sonaba música de inspiración cubana. En la parte final hizo el tema que más me gusta de los que he escuchado suyos, "Tú me dejaste de querer". En general, a pesar del despliegue de músicos, no me pareció para tanto, pero, por otra parte, tengo entendido que más que un concierto para escuchar es una performance para ver y yo no lo vi, así que no puedo juzgar.

El Concierto 25 Aniversario fue algo similar a lo que vimos en el 20 aniversario: Charlie Bautista dirigió a una banda que interpretó varios clásicos de la música en español con distintos cantantes. Cuando comenzó a presentar, los que teníamos al lado empezaron a gritar: "¿Y tú quién eres?". Nosotros, que tenemos como juego cada año contar a qué músico vemos más, si a Charlie Bautista  o a Ricky Falkner, les respondimos. Como novedad del concierto, esta vez la banda estaba compuesta toda por mujeres. No recuerdo todos los cantantes ni los temas, pero estuvieron el cantante de Arde Bogotá (haciendo "Club de fans de John Boy", de Love of Lesbian), el cantante de Shinova haciendo "Mi gran noche" de Raphael, Alberto de Miss Caffeína haciendo "Supersubmarina" del grupo del mismo nombre, Daniel Fernández interpretando "Qué voy a hacer" de Los Planetas, un chico y una chica que no recuerdo de dónde eran pero hicieron "Cómo hablar" de Amaral, Chica Sobresalto con uno de los himnos del Sonorama, "Toro" de El Columpio Asesino, Rocío Sáiz con "Devil Came to Me" de Dover, Vega con "No puedo vivir sin ti" de Los Ronaldos, la cantante de Kuve haciendo "La chica de ayer" de Nacha Pop, Marisa Valle Roso haciendo "Copenhague" de Vetusta Morla, Jordi Évole interpretando meritoriamente otro de los himnos del festival, "Emborracharme" de Lori Meyers, Xoel con su propio "Que no", que ya había hecho en el 20 aniversario, Mikel Erentxun haciendo "Cien gaviotas" y "En algún lugar" de Duncan Dhu, Shuarma haciendo "Te quiero" de Perales y todos juntos homenajeando a Jarabe de Palo con "Grita". Aunque el repertorio era bueno, el sonido no acompañó y a mí me dejó con un sabor agridulce: creo que una ocasión así merece más preparación. En cualquier caso, lo pasamos bien igual.



Etiquetas: , , , ,

Por Guillermo Hoardings | Enlace permanente
7:18 p. m. | Comentarios (0)

Sonorama 2022. Día 3

~ sábado, agosto 13, 2022 ~

Tercer día del Sonorama. Esta vez planificamos mejor y llegamos al recinto a la hora prevista de apertura de puertas... que al final se retrasó 20 minutos.

En cualquier caso, pudimos ver a Ángel Stanich en primera fila muy ladeados. Sólo había escuchado alguna canción suelta y me echó para atrás la voz. En directo, tenía muchos fans y una banda muy buena que sonaba de lujo: todo superclarito, con partes diferenciadas y buenos arreglos de guitarra y teclado. El bajista tiene el mismo bajo que yo y me gustó mucho cómo sonaba. Las letras de Stanich parecen interesantes. Hay que escucharlas más. Pensaba que sería más cantautoril, pero fueron temas con mucho ritmo. Hubo una sorpresa: salió Mikel Erentxun en una canción, "Carbura". Tendría continuación más adelante, como veremos. Ángel acabó siendo llevado en volandas por el público.



El segundo concierto que vimos fue Vega. Tampoco la había escuchado mucho antes. Llevaba una banda solvente y tiene una voz grave y profunda. A mí no me llegó mucho, pero lo hizo bien.

Nos habíamos situado en primera fila muy ladeada para Vega pero conseguimos casi centro cuando se fueron sus fans. En lugar de ver la orquesta de Emil Kusturika, nos quedamos esperando para disfrutar desde esa posición privilegiada al siguiente artista en ese escenario: Mikel Erentxun. Salió con la misma banda con la que le vimos en el Casino de Gijón hace poco e hizo un concierto de grandes éxitos para adaptarse al formato de duración reducida que exigen los festivales. Sonaron "Mañana", "Cicatrices", "A un minuto de ti", "Cartas de amor", "Esta luz nunca se apagará" y algunos grandes éxitos de Duncan Dhu: "Cien gaviotas", "Rozando la eternidad" (junto con Stanich devolviendo la invitación), "Una calle de París", "Esos ojos negros" y, para rematar, un muy coreado "En algún lugar". No sé cuál sería la reacción general del festival porque yo estaba situado en medio de los fans, pero creo que fue muy bien recibido. Yo lo disfruté menos que en el concierto del Casino, que al ser en sala y más largo, y sólo con seguidores muy entregados, fue más especial, pero también de otra manera porque justo este verano he leído el interesante libros sobre él escrito por Ana Lucas Ruiz y he aprendido muchas cosas de su carrera.



Luego en ese escenario era el regalo sorpresa. Había mucha expectación, pero ya nos habían llegado rumores de que desde el camping había escuchado a Leiva en la prueba de sonido por la mañana. Por otra parte, cuando fuimos viendo cómo montaban y quién era (estaba Alex "Hijo" como técnico), tuvimos claro que iba a ser él y así fue. Como animal de escenario que es, salió dándolo todo, con una banda que suena como un trueno. Hizo hasta algunos pasos de baile casi a lo Michael Jackson en una de las canciones nuevas que suenan más funky. Siempre que le veo echo de menos más solos, porque me flipa esa forma que tiene de estirar las cuerdas.

Yo esperaba un concierto más especial, algo como tener colaboraciones, pero fue un concierto normal. Quizás, como dos detalles especiales con el Sonorama, una muy bonita versión de "El equilibrio es imposible" con recuerdo para Iván Ferreiro y unas palabras de recuerdo también para Supersubmarina. Una de las cosas bonitas del Sonorama es que ves cómo la gente no se olvida de ellos ningún año.

El repertorio de grandes éxitos con alguna del último disco, "Cuando te muerdes el labio" y rematado con tres de Pereza: "Como lo tienes tú", "Estrella Polar" y "Lady Madrid".




Con eso, nos fuimos a cenar a la una y pico de la noche y al hotel: no podíamos con más.


Etiquetas: , , , , ,

Por Guillermo Hoardings | Enlace permanente
7:35 p. m. | Comentarios (0)

Sonorama 2022. Día 2

~ viernes, agosto 12, 2022 ~

Nuestro plan el segundo día del Sonorama no incluía ver los escenarios principales más que al principio, así que nos perderíamos conciertos interesantes como el de Jeanette, Coque Malla o Future Islands, pero queríamos empezar por Los Secretos.

Llegamos tarde al recinto y además nos encontramos con una enorme aglomeración en la entrada. Luego descubrimos que hubo problemas y abrieron las puertas con retraso, así que creo que vimos todo el concierto de Los Secretos: cuando llegamos estaban haciendo "Buena chica" y todavía pudimos situarnos relativamente cerca. La formación con tres guitarras, apoyados por el gran Txetxu Altube, sonaba de lujo desde el principio. Aunque nunca he sido seguidor suyo, he leído el libro "Adiós tristeza" precisamente hace unos meses y me emocioné en bastantes partes del concierto, como en la sección que hicieron a cappella de "Agárrate a mí, María", una canción que no sé por qué nunca me ha gustado pero que pensando en lo que significaba me tocó.

Es curioso porque tuvieron fama de blandos, pero su música está arreglada y ejecutada con maestría y son probablemente uno de los mejores ejemplos de AOR que tenemos en España y tienen grandes solos de guitarra. Viéndolos pensaba que eran los Eagles españoles, aunque con un toque personal, especialmente por las influencias que Enrique Urquijo trajo de la música sudamericana.

Me sorprendió que en el público, donde había gente de todas las edades, los jóvenes también parecía que se sabían las canciones. Fueron muy aclamados.


Los siguientes en el otro escenario principal fueron Celtas Cortos. Los vimos de muy lejos pero pudimos comprobar que no sonaban precisamente a viejos: hicieron bailar a todo el festival con sus grandes clásicos. Es curioso, pero a pesar de los años, los temas que denuncian parece que no pasan de moda: el mundo no progresa adecuadamente.


Después de una cena en una zona de comidas no muy masificada pero con precios caros, fuimos al escenario en el que pasaríamos el resto de la noche: el dedicado al 25 aniversario. Los tres primeros grupos fueron los mismos que en aquella primera edición, empezando por Chucho. El público era más talludito: no había jóvenes y no era muy abundante. Yo nunca he sido fan del linaje de Surfin' Bichos. De hecho, unos conocidos que eran muy seguidores de este estilo me invitaron a tocar con ellos hace años y sólo duré un ensayo: tanto noise me aburría. De Chucho sólo reconocí "El detonador EMX3". El sonido del bajo era una bola y la voz de Alfaro (que tenía un brazo escayolado) nunca me ha gustado.


Mercromina fue algo similar. Aunque durante la prueba de sonido vi al bajista usando distorsión y me temí lo peor, luego el bajo no hizo tanta bola y se pudo escuchar bien. En cualquier caso, a mí también me aburrieron.

Fue entonces el turno del tercer grupo de aquel primer festival, los asturianos Doctor Explosion. El cambio fue tremendo: tras el shoegazing de Chucho y Mercromina, las ganas de interacción con el público de Jorge y los suyos fueron refrescantes. Los vimos desde primera fila. Sonaron muy bien y se tiraron, literalmente, al público, en una canción al principio sólo Jorge pero luego en otra todos saltaron la valla y tocaron desde en medio del público. Es una pena que las letras sean tan chorras porque hacen un pop de guitarras muy intenso.



Los siguientes fueron Los Estanques. Los había descubierto precisamente en el Sonorama hace años en uno de los escenarios pequeños del pueblo y me habían sorprendido, pero habían tenido mala suerte con el sonido. Esta vez sonaron apabullantes con su maestría y su locura instrumental. Yo estaba literalmente boquiabierto, especialmente con el bajista, que hacía unas escalas increíbles mientras bailaba y se escuchaba con una definición perfecta. No me acaba de convencer mucho la forma de cantar y su rock progresivo no es un estilo de música que me apetezca escuchar en general, pero los disfruté muchísimo y me hicieron pensar en que echo de menos más desarrollos instrumentales en la música que se hace ahora, que tiende a casi no tener solos, intros, outros, interludios y todas esos detalles que hacen más mágicas las canciones.

Volvimos a la primera fila para ver a Egon Soda, que también habíamos visto en el Sonorama hace años. Hicieron un concierto sobrio, escogiendo curiosamente no de sus canciones más cañeras, pero sonaron muy bien, cosa de esperar sabiendo que son todos maestros de lo suyo. Un placer escuchar la voz de Ricky Falkner desgranar esas letras tan interesantes. Un detalle que me hizo gracia: el percusionista llevaba una camiseta con sólo unos nombres: "Lorelai & Rory & Emily & Sookie & Paris", un mensaje para los que como yo somos fans de las Chicas Gilmore.

Ya a las dos de la mañana salieron a escena Def Con Dos. Tampoco los he seguido mucho y me sorprendió lo heavy metal que era su base: batería con doble bombo y guitarrista guitar hero. Tanto él como el bajista, más en la línea Flea, eran unos virtuosos de su instrumento. No entendí muchas de las letras y ya estaba muy cansado, pero dieron un buen concierto y pusieron a botar al público.

Volver al coche fue un suplicio: la espalda me mandaba a ratos mensajes en forma de pinchazos. Pero mereció la pena ver tantos grupos históricos y actuales de la música en español de todos los estilos: el Sonorama es un gran botellón, pero también es una experiencia cultural de primer orden para quien esté interesado en la música española.

Etiquetas: , , , , , , , , ,

Por Guillermo Hoardings | Enlace permanente
1:22 p. m. | Comentarios (0)

Sonorama 2022. Día 1

~ jueves, agosto 11, 2022 ~

Otro año más al Sonorama. No somos como esa gente que lleva yendo más de 20 años (esta edición se cumplen 25) pero ya es una tradición.

De hecho, íbamos tan seguros de conocerlo que el primer día fuimos directamente al camping a ver los conciertos en el escenario allí, hasta que, después de atravesar por esa enorme ciudad de tiendas de campaña que parece casi un campamento de refugiados, caímos en la cuenta de que este año los primeros conciertos no eran allí sino en el recinto. Ya nos extrañó que no se recogiesen en el camping las pulseras...

Llegamos justos para el primer artista que queríamos ver: Álvaro Suite, guitarrista habitual de Bunbury. Había todavía sol y poca gente, mucha disfrazada. El sonido fue malo, con el bajo haciendo una bola que impedía disfrutar de lo demás. No conocía las canciones y la verdad es que tampoco me llegó nada atractivo, igual por las condiciones de sonido.




En el descanso fuimos a la zona de comidas. Parecía similar a la de otros años. Como era el primer día y pronto, no hubo agobios, pero me temo que el resto de días si los va a haber.

Luego era el turno de Santero y los Muchachos. Empezaron también sonando muy mal, pero mejoró tras un par de temas y pudimos disfrutar de su sonido con ciertos toques stonianos y de sus acertados juegos de voces. Creí que no serían un grupo muy festivalero, pero la gente estaba con ganas de bailar y las canciones resultaban adecuadas. En la penúltima canción cayeron unas gotas de lluvia y el público, ya muy abundante, se desmadró.

Me gusta que son un grupo con personalidad, fácilmente identificables por la voz, con uso significativo de guitarras acústicas (a veces dos a la vez), incluso en canciones con bastante ritmo. A mí no me acaban de llegar, no sé por qué, pero esta noche disfruté mucho escuchándolos y bailando, y recordé cuando compartí cartel con ellos en el Gijón Sound Festival.



El siguiente grupo fue Arnau Griso. No los conocía y no sabía que iba a encontrarme. Me parecieron algo a medio camino entre Melendi y Ska-P, con canciones ingeniosas ("frases de taza", como decía una de ellas), demasiado humorísticas para mi gusto, bien interpretadas aunque el sonido no fue bueno. El público se lo pasó muy bien. Dijeron que era uno de sus últimos siete conciertos.



Ahí lo dejamos. Lo siguiente era Luis Brea y ya lo habíamos visto un año en el camping y no nos había gustado. Nos fuimos al hotel: hay que reservarse que todavía queda mucho Sonorama.

Etiquetas: , , , ,

Por Guillermo Hoardings | Enlace permanente
12:57 p. m. | Comentarios (0)

Quique González en el Conde Duque

Nos quedamos sin ver a Quique en el concierto en Madrid de la gira "Sur en el valle" por culpa del cambio de fecha debido al COVID: pasó de un sábado a un miércoles y se nos hizo imposible. Así que nos alegramos cuando programaron una nueva fecha dentro de los Veranos de la Villa. Además, había ganas renovadas de verlo tras haber leído el libro de conversaciones con Arancha Moreno.

[En curso]

Etiquetas: ,

Por Guillermo Hoardings | Enlace permanente
12:34 p. m. | Comentarios (0)

Sobre los festivales musicales

~ martes, agosto 09, 2022 ~

Esta semana empieza el Sonorama. Fuimos por primera vez en el 20 aniversario y desde entonces hemos estado en todas las ediciones excepto en 2021.

Voy con miedo: tengo la espalda muy tocada y no sé cómo voy a aguantar tantas horas de pie. Por otra parte, he estado intentando hacerme un horario y me ha hecho pensar sobre la organización de los festivales musicales.

El año pasado, con medidas extra por la COVID, fue un experimento que me permitió apreciar dos cosas:

1)     Aunque soy de la opinión de que la música pop y rock se disfruta más de pie y en las primeras filas, en algo tan largo como un festival y a mis años, agradezco la oportunidad de usar sillas. El año pasado lo peor es que había sectores diferenciados y si te tocaba en uno alejado no tenías manera de mejorar el sitio ni madrugando. Por otra parte, entiendo que la parte delantera no debería ser una zona de sillas, pero estaría bien que hubiera algo al fondo, para poder descansar y para los artistas que no te interesen tanto.

2)      El solapamiento de horarios no es malo sólo por lo obvio, que toquen a la vez dos (¡o tres!) grupos que a priori te gustan, sino también porque limita la exposición a grupos nuevos. El año pasado, como sólo tocaba un grupo en cada horario, vi a muchos que no hubiese ido a ver porque los desconocía y hubiese escogido a otras opciones conocidas si se hubiesen solapado. Yo entiendo que parte de la gracia de los festivales es tener un cartel muy completo, con muchos artistas que te gusten y con artistas para todos, pero el nivel al que llegar por ejemplo el Sonorama, con tres conciertos grandes al mismo tiempo, me parece contraproducente. A veces, menos es más.

En fin, todo tiene sus ventajas e inconvenientes y estas son sólo unas reflexiones particulares hechas desde mi situación personal. En cualquier caso, voy a intentar disfrutar de mucha música.

Etiquetas:

Por Guillermo Hoardings | Enlace permanente
5:29 p. m. | Comentarios (0)

Andrés Calamaro en el Metrópoli

Crónica del concierto de Andrés Calamaro en el Metrópoli de Gijón el 5 de julio de 2022

Me estuve pensando si ir a verlo: como personaje, Calamaro pasó de hacerme gracia por su locura a caerme muy mal, y me temía que además estuviese en muy mala forma musical. Pero he escuchado mucho a Los Rodríguez y algunos de sus discos en solitario (sobre todo, “El cantante” y una selección de “Honestidad Brutal”) y me parecía que podía estar desaprovechando una oportunidad cómoda y barata (la entrada al Metrópoli son 5 euros) de recordar viejos tiempos, así que llamé a un amigo y fuimos.

Lo vimos desde lejos. La banda era muy competente, aunque la guitarra estaba un poco baja en la primera mitad del concierto. Empezó con canciones que no conozco, imagino que de los últimos discos, pero luego sonaron muchos de sus clásicos (“Paloma”, que no estaba en esa selección que hice de “Honestidad brutal” pero recuperé gracias a Quique González, “Crímenes perfectos”, “Media Verónica”, “Sin documentos”, “El salmón”…) e incluso enlazó tres canciones (“Mi enfermedad”, “A los ojos” y “El canal 69”, si no recuerdo mal) de un disco que no sólo he escuchado sino que también he tocado entero muchas veces: el disco pirata de Los Rodríguez. Me faltó mi favorita: “Engánchate conmigo”.

Andrés cantó bien, aunque estaba un poco desubicado: dos veces dijo que estaba muy contento de tocar al lado de El Sardinero, cuando en realidad estaba al lado de El Molinón. Me gustó escuchar esas canciones. El público parecía bastante fan y coreó mucho la parte de metales de “Flaca”. Aunque sus canciones tienen muchos defectos, sobre todo en las letras, tiene algún tipo de magia especial. De hecho, a mí me parece que es mejor cantante que compositor y por eso me gusta tanto “El cantante”.

Etiquetas: ,

Por Guillermo Hoardings | Enlace permanente
5:25 p. m. | Comentarios (0)

Bely Basarte en el Metrópoli

Crónica del concierto de Bely Basarte en el Metrópoli de Gijón el 1 de julio de 2022

Fuimos a ver a Beli Bastarte al Metrópoli. Vimos gente joven esperando en el escenario principal. Parecía poca gente y nos pusimos a esperar también. Pasó la hora anunciada y no parecía que hubiese movimiento: tardamos quince minutos en darnos cuenta de que el concierto de Bely sería en el escenario secundario.

Cuando llegamos, lógicamente, estaba empezado. A Bely le acompañaban dos músicos: un pianista y un guitarrista que a veces tocaba el violín, ambos unos virtuosos. Había algunos fans en primera fila. Yo no conocía su música y pensaba que sería algo más raro, pero era música bastante cantautoril. Hubo algunos momentos muy bonitos.

Etiquetas: ,

Por Guillermo Hoardings | Enlace permanente
5:24 p. m. | Comentarios (0)