Escritos sobre música


Powered by Blogger

Licencia de Creative Commons
Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons.

No hay mayor éxito que el fracaso y el fracaso no es en absoluto éxito

~ domingo, noviembre 25, 2007 ~

En la magnífica serie del disco de la semana que dedicaron en Canal+ a Quique González (más buscando), el madrileño dice: "Supongo que tiene más cosas que contar un tipo así con pinta de... no sé... con una mochila en la barra de un bar a un corbata con gin-tonic a las 6 después de la oficina y peinado ahí, impresionantemente, perfecto y con un BMW en la puerta. Seguro que el tío de la mochila tiene una canción más interesante que el otro". Pero al final parece darse cuenta de que eso es una gilipollez y rectifica: "Aunque todo depende del punto de vista desde el que lo mires, claro".

Cada día me revienta más el tópico de que el fracaso es donde se esconde lo auténtico, o la belleza. Puede que Kerouack arrancase sus palabras a recién nacidos (Natalie Merchan dixit). Puede que Bukowski haya escrito una frase tan certera como "Pero nos han dejado un poco de música". Puede que el piano borracho de Tom Waits prenda las luces del alba con un encendedor metálico, cada día como una colilla encontrada. Pero no. Hay igual de belleza en cualquier éxito. Porque no hay éxito sin fracaso.

Puede que el maestro haya dejado escrito: "There's no success as failure, and failure is no success at all". Tonterías. Los triunfadores no existen. El hombre de la gomina puede llorar cada noche en la cama. O puede drogarse más que el chico de la mochila. O puede que no. Puede que se sienta bien. Puede que su único vicio sea rascarse la marca de los calcetines. Y así todo, puede tener una historia.

Todos nos vamos a morir. Nadie triunfa sobre la enfermedad, que siempre nos rodea. Cualquier historia de un supuesto triunfador está llena de días duros. La mitad de la gente a la que le toca la lotería acaba más pobre que antes. Hay tiburones en cualquier sitio. Majorana desapareció sin dejar rastro. Y triunfar no es menos digno que fracasar.

La gomina o los trajes no dicen nada sobre las historias que hay detrás. Ni las mochilas. Las personas somos lo que hay cuando te quitas la ropa. Y la piel.

Y quien puede sonreír es siempre un personaje con historia.

Etiquetas: , , , , ,

Por Guillermo Hoardings | Enlace permanente
8:11 p. m.

Comentarios (2)

Anonymous Anónimo ~ 10:08 p. m. #

El malditismo da para mucho, y eso es algo que llevamos arrastrando como 50 años, si no más. No creo que sea ni bueno ni malo, es otra forma de ver las cosas; a todos (o a muchos, por no generalizar) nos puede atraer "el otro lado". Take a walk on the wild side :-)

Un saludo

 

Anonymous Anónimo ~ 11:22 p. m. #

Cuando le oí decir esa frase, pensé casi eso mismo que has escrito. Cachis´ en los tópicos encadenadores...

Un saludo :)

 

<< Home